
Macarena Arellano del Río
Soy Relacionadora Pública de la Universidad de Las Américas y trabajo hace más de 25 años en la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Tengo una familia maravillosa que hemos formado con mi marido que es autista y donde 2 de mis 4 hijos también lo son. En nuestro caso, supimos de esta condición gracias al diagnóstico de nuestro hijo menor cuando tenía poco menos de 4 años (hoy tiene 10) A raíz de esto, supimos que mi marido y mi otra hija también lo eran. Ahí empezó nuestro andar, el que no ha sido fácil…
Después de casi 7 años he sido testigo de como tienen que enfrentar desafíos que son, muchas veces, invisibles para otros.
Durante estos años me ha tocado enfrentar la discriminación, la falta de colaboración y el poco entendimiento en entornos educativos, de salud y laborales. Me he encontrado también con muchas historias de vida de familias con integrantes neurodivergentes que viven, al igual que yo, estas mismas problemáticas.
He tomado el desafío de liderar esta Red porque creo firmemente que podemos cambiar las cosas y darles un mejor lugar para vivir y desarrollarse a todas las personas neudivergentes. Se los debemos.
Para hacer las transformaciones que necesitamos, es fundamental la experiencia, el conocimiento y, sobre todo, el apoyo y la colaboración de todos.
Esta es una invitación a cambiar el mundo y las vidas de muchos.
¡¡¡En la diferencia está la riqueza!!!

Rodrigo Hollmann Fernández
Soy periodista y cientista político, pero sobre todo, soy autista y padre de dos personas extraordinarias que, como yo, navegamos el mundo con una neurología distinta. Nuestra historia familiar comenzó a tejerse cuando, tras años de observar las singularidades de mis hijos, comprendí que no estábamos frente a “trastornos”, sino ante formas únicas de percibir, procesar y aportar al mundo.
En nuestro hogar, el autismo no es un diagnóstico: es un lenguaje compartido. A través de él, hemos aprendido que las miradas que evitan el contacto visual pueden detectar patrones invisibles, que los silencios llevan preguntas profundas y que los intereses intensos son semillas de innovación y creatividad. Pero también hemos enfrentado realidades duras: sistemas educativos que exigen adaptaciones unilaterales, espacios públicos que saturan los sentidos y un mundo laboral que aún confunde la neurodivergencia con incapacidad.
Por más 20 años, mi trabajo como comunicador me ha permitido analizar cómo se construyen las exclusiones sociales. Hoy, desde esta red, convertimos ese conocimiento en acción. Aquí no hablamos de “integración”, sino de co-creación: un espacio donde educadores, familias, profesionales y, sobre todo, personas neurodivergentes redefinimos juntos lo que significa pertenecer.
Esta iniciativa nace de nuestras batallas cotidianas: de las veces que mis hijos llegaron angustiados del colegio porque los llamaron “raros” y fueron víctimas de bullying, de los informes médicos que patologizaron su esencia, de las miradas incómodas en reuniones familiares. Pero también surge de nuestra esperanza: de verlos crear soluciones ingeniosas a problemas complejos, de descubrir su empatía sin límites y de atestiguar cómo su forma de ser enriquece cada espacio que habitan.

Carlos Pinto Abudahan
Abogado especialista en Derecho de Familia y Derecho de Discapacidad, con amplia experiencia en trabajo con población vulnerable e intervención en casos de alta complejidad psicosocial. Cuento con experiencia en el diseño, elaboración e implementación de programas sociales y formulación de planes de intervención centrados en la persona.
Cuento con una trayectoria de más de 15 años en los principales tribunales de justicia, en materias de Familias, Causas de Protección, Juicios de Cuidado Personal, Patria Potestad, Relación Directa y Regular, Cumplimiento del Régimen de Visitas, Juicios de Alimentos, solicitudes, aumentos, rebajas y cese de estos, Juicios de Divorcios unilaterales y de común acuerdo, Compensaciones Económicas y Disoluciones de Sociedad Conyugal, Juicios de Violencia Intrafamiliar y causas de protección, habiendo trabajado como curador ad litem en el Programa Mi Abogado, programa de representación jurídica especializada de NNA, DE LA Corporación de Asistencia Judicial y Centro de BUEN TRATO (actual Red de Protección) dependiente del Departamento Comunitario de la municipalidad de Las Condes, centro especialista en temas de familia.
Amplia experiencia como docente y como relator en materia de discapacidad, realizando relatorías y exposiciones en universidades, seminarios, fundaciones e instancias comunales municipales a nivel de la región metropolitana y regiones.

Gonzalo Escobar Salamanca
Mi historia comienza en los cerros empinados de Valparaíso, donde de niño corría entre escaleras infinitas y casas que parecían colgadas del cielo. Ahí, en ese laberinto de colores y voces, aprendí mi primera lección sobre la diversidad: cada familia, cada vecino, tenía su propia forma de vivir, y eso era hermoso.
Años después, con mi título de contador bajo el brazo, pensé que mi vida sería de números y balances. Pero la vida tenía otros planes. Un día conocí a un niño brillante que no podía concentrarse en clase como los demás. Sus padres se angustiaban, no por dinero, sino por la frustración de ver cómo el sistema rechazaba a su hijo.
Esa noche no pude dormir. Recordé mi infancia en Valparaíso, donde las diferencias nos hacían únicos, no problemáticos. ¿Por qué aquí era distinto?
Decidí que no podía quedarme de brazos cruzados. Me uní como cofundador de la Red para la Inclusión de la Neurodiversidad porque creo que todos merecemos las mismas oportunidades de crecer. No es caridad, es justicia.
Hoy trabajo para que ningún padre vuelva a sufrir o llorar por la incomprensión. Porque en las diferencias está la riqueza, y esa riqueza debe ser de todos.
Cambiar el mundo empieza por cambiar nuestra mirada.
Los invitamos a:
- Reemplazar el “¿Qué tienes?” por el “¿Qué necesitas?”
- Transformar salas en laboratorios de neurodiversidad.
- Convertir políticas públicas en puentes, no en barreras.
- Construir una sociedad donde nadie tenga que enmascarar su neurología para ser aceptado.
“En las diferencias está la riqueza” es más que un eslogan: es el fundamento de esta travesía colectiva. Aquí, cada voz neurodivergente es un nuevo universo que aporta. ¿Nos ayudan a construir un mundo donde caben todas las formas de ser?
¡Este es el momento de reescribir, juntos, lo que significa incluir!